20 de agosto de 2025

La Secretaría de Salud Departamental presentó la segunda edición de la estrategia de mejoramiento del estatus sanitario, una iniciativa que busca garantizar la seguridad alimentaria en el archipiélago. En esta oportunidad, el foco principal está en los establecimientos de comidas rápidas, con el fin de fortalecer las prácticas higiénicas y de manipulación de alimentos.

Más de 10 negocios de comida rápida participan en esta estrategia, la cual contempla un proceso de capacitaciones, acompañamiento técnico y visitas de seguimiento, orientadas a lograr que cada establecimiento cumpla con los estándares exigidos en materia sanitaria. El objetivo es que los emprendedores obtengan un concepto sanitario favorable y que sus negocios se conviertan en espacios reconocidos por su compromiso con la salud pública.

En el lanzamiento, se destacó que los propietarios de estos establecimientos deberán suscribir un compromiso formal para iniciar el proceso, que incluirá diagnósticos iniciales y posteriores jornadas de formación. Con ello se busca que cada negocio pueda identificar sus debilidades y adoptar mejoras efectivas en sus procesos de atención y manipulación de alimentos, la estrategia no solo busca elevar el nivel de cumplimiento de los requisitos sanitarios, sino también brindar herramientas para que los emprendedores puedan fortalecer la confianza de sus clientes. De esta manera, los establecimientos participantes tendrán la oportunidad de diferenciarse como espacios saludables y responsables con la comunidad.

Los negocios que logren alcanzar los estándares establecidos por la Secretaría de Salud recibirán un reconocimiento oficial por parte de la Gobernación, distinción que servirá como respaldo institucional de su compromiso con la inocuidad alimentaria. Este sello de calidad permitirá a los consumidores identificar cuáles son los locales que garantizan condiciones óptimas para el consumo de sus productos.

En este proceso participan tanto funcionarios de inspección y vigilancia como emprendedores locales, quienes reconocen la importancia de actualizar y mejorar constantemente sus conocimientos sobre la manipulación de alimentos. La estrategia se convierte en un puente de trabajo conjunto entre las autoridades sanitarias y los pequeños empresarios de la gastronomía local.