Por: Jeimy Almanza
Diciembre no solo es época de celebraciones, también es el momento perfecto para jugar con texturas, colores y accesorios que reflejen personalidad sin perder elegancia. Este año, las tendencias apuestan por una mezcla equilibrada entre lo festivo y lo versátil, ideal para el clima de la isla.
Las texturas toman protagonismo. El terciopelo regresa con fuerza en vestidos, pantalones y blazers, aportando un toque sofisticado sin ser exagerado. Las lentejuelas siguen presentes, pero ahora se llevan de forma más sutil: en detalles, prendas combinadas con denim o piezas clave que elevan cualquier look sin recargarlo. También se suman materiales como la seda y el encaje, perfectos para blusas y vestidos que funcionan tanto de día como de noche.
En cuanto a color, el clásico rojo cede espacio a tonos más sobrios y modernos. El verde salvia se posiciona como el favorito de la temporada, acompañado de tonos joya como burdeos, azules profundos y verdes intensos. Los metálicos —oro y plata— siguen siendo aliados para dar brillo, mientras que los neutros ayudan a equilibrar y crear combinaciones más relajadas, ideales para celebraciones largas.
Durante el programa, la diseñadora raizal Keisha Ivana Charris James compartió su visión desde la moda local. Destacó la importancia de pensar en prendas cómodas, atemporales y fáciles de reutilizar, sin dejar de lado la identidad isleña. Trajes sastre con cortes modernos, vestidos midi o largos, pantalones de pierna ancha y corsets como pieza central se convierten en infaltables del armario decembrino.
Los accesorios también juegan un papel clave. Pulseras, collares, tobilleras y detalles artesanales ayudan a personalizar cada outfit y a darle ese toque único que marca la diferencia. Además, la sostenibilidad gana terreno: elegir prendas duraderas, materiales conscientes y apoyar marcas locales se convierte en una tendencia que conecta moda y responsabilidad.
En San Andrés, la Navidad se viste con estilo propio. No se trata de seguir reglas estrictas, sino de combinar lo festivo con lo práctico, sentirse bien y celebrar con looks que representen quiénes somos. Porque en la isla, la moda también es una forma de expresión.