19 de mayo de 2025
En respuesta a múltiples denuncias de la comunidad, la Secretaría de Seguridad y Convivencia Ciudadana, en articulación con la Policía Nacional, llevó a cabo un operativo para controlar la perturbación generada por el exceso de ruido en distintas zonas de la isla. Esta acción, respaldada por el Decreto 0730 de 2024, hace parte de una estrategia más amplia para fortalecer la convivencia ciudadana y recuperar espacios afectados por actividades que alteran la tranquilidad pública.
Los operativos, que se han intensificado en sectores considerados críticos, dejaron como resultado la incautación de tres altoparlantes tipo “pick up” y la imposición de once comparendos. Siete de ellos fueron por infringir el artículo 33 del Código Nacional de Seguridad y Convivencia, el cual sanciona comportamientos contrarios al respeto mutuo y al bienestar común. Las autoridades informaron que estas medidas buscan enviar un mensaje claro: no se tolerará el uso indebido de equipos de sonido que perturben la vida diaria de los residentes.


El coronel de la Policía Nacional, destacó que estas acciones han logrado reducir notablemente las riñas en el territorio insular en las últimas semanas. Además, señaló que los elementos incautados se encontraban en lugares como Playa Bengué, Charquitos, Tablitas, Back Road y Serranilla. Reiteró el llamado a quienes usan estos equipos como fuente de ingresos, para que coordinen con la Secretaría de Seguridad y así evitar sanciones innecesarias mediante una regulación adecuada de su actividad.

Durante la intervención, se evidenció el compromiso de las autoridades por mantener el orden y proteger los derechos de la comunidad a un entorno tranquilo. Las intervenciones seguirán desarrollándose en diferentes puntos de la isla donde se reporten casos reiterados de afectación a la convivencia.
Con este tipo de acciones, la administración departamental busca no solo sancionar, sino también educar sobre la importancia del respeto al espacio común. Las autoridades reiteraron que los operativos contra el ruido continuarán de forma constante, con el fin de garantizar el bienestar de todos los habitantes y preservar la imagen de San Andrés como un destino seguro.