Uno de los hechos más destacados fue la ubicación del arma de fuego abandonada por individuos que huyeron al notar la presencia de los uniformados. La pronta reacción policial permitió asegurar el arma sin que se produjeran enfrentamientos ni riesgos para la comunidad. Este tipo de acciones preventivas ha contribuido, según las autoridades, a una reducción del 50 % en los delitos que afectan directamente la vida de las personas.

La Policía Nacional ha reiterado su llamado a la colaboración ciudadana, invitando a los habitantes del archipiélago a reportar cualquier hecho sospechoso o situación que infrinja la ley. Se ha habilitado una línea directa para recibir información de forma confidencial, como parte del esfuerzo conjunto entre comunidad y fuerza pública para mantener la tranquilidad en las islas.

Con estos resultados, las autoridades refuerzan su compromiso de seguir trabajando de manera constante para reducir la criminalidad y garantizar la seguridad en todos los rincones del departamento. La labor preventiva y operativa se mantiene activa, con patrullajes y presencia constante en zonas estratégicas para combatir cualquier acción que altere el orden público.