Esta semana, la isla se convirtió en punto de encuentro para apicultores nacionales e internacionales interesados en el intercambio de conocimientos sobre genética apícola y producción de miel. La visita tuvo como principal objetivo conocer y aprender sobre el método Palmer San Andrés, una técnica que ha ganado reconocimiento por mejorar la productividad de las colmenas, sin poner en riesgo la sanidad de las abejas.
Durante la jornada, apicultores provenientes de Medellín, así como expertos de Costa Rica, participaron en prácticas de mejoramiento genético que incluyeron la inseminación instrumental, una técnica avanzada utilizada para seleccionar rasgos deseables en las abejas reinas. Estas prácticas buscan fortalecer las capacidades productivas de los apiarios y replicar en otras regiones la experiencia que ofrece el archipiélago, especialmente en relación con la genética europea que predomina en las islas.